Hoy 15 de noviembre se celebra la festividad de San Alberto Magno. Así que por un día me gustaría dejar de lado los temas científicos puramente para hablaros de porque se considera a San Alberto el patrón de los científicos o de las carreras de ciencias. En la mayoría de los casos se declara a los santos patronos de algo por su vida o trayectoria profesional. Así que creo que lo mejor es explicar un poco la vida de este Santo.
San Alberto Magno nace en el seno de una familia de nobles en la Baviera Alemana en el año 1206. En su adolescencia desea estudiar la carrera de leyes por lo que sus padre lo mandan a Bolonia, ciudad que se convertiría en la cumbre de los estudios juristas. Más tarde fue a estudiar a Venecia, asentándose por ultimo en Padua, donde terminó sus estudios. En 1223 conoce a Bto. Jordán de Sajonia la relación con este beato hará que San Alberto reciba la llamada de Dios e ingrese en la Orden de Predicadores. Su familia se opone firmemente a esta decisión pero él permanece fiel a su fiel.

En 1228 es enviado como profesor a su ciudad, donde tendrá de discípulo a Santo Tomas de Aquino. En 1248 se tiene información de que se encuentra dirigiendo el Estudio General de la Orden de la ciudad. Muchos son los cargos relacionados con el estudio que desempeñaría después. Destacando el puesto de profesor de la Curia Pontificia.
Los escritores de la época describen a San Alberto como un hombre sagaz, equilibrado. Con una especial dedicación a la investigación y la enseñanza. Era un hombre abierto a lo universal. Como naturalista era un hombre de vocación analítica y observadora. Pero hay que destacar que San Alberto estudia, investiga, analiza todo en función de la Santa Predicación. Por eso utiliza las ciencias naturales: biología, botánica, química, zoología, arqueología, combinándolas con la filosofía y la teología. Es curioso como un hombre de esa época miraba la ciencia de esa forma, dada la persecución que tenían las personas que estudiaban la ciencia. Es cierto que no tenía la mirada científica que tendrían los fundadores de la ciencia moderna como Galileo. Sus trabajos de investigación se dedicarían a observar, describir y clasificar.
Este trabajo de investigación le hizo descubrir el arsénico en 1250. Sus conocimientos de geografía y astronomía le hicieron explicar con argumentos sólidos que le tierra es redonda. ¿Pero qué hizo que San Alberto fuera nombrado patrono de las ciencias naturales? Sin lugar a duda el redescubrimiento, en las universidades europeas, de la ciencia que la escuela de Aristóteles había dejado al mundo, así como la labor científica que habían realizado los árabes. Hasta su llegada a la universidad, la ciencia no se enseñaba en las universidad, los que sabían algo de esta rama era por pura curiosidad. Esto se debía que la ciencia de los árabes estaba prohibida y se consideraba a Aristóteles un proscrito. Todo esto cambio cuando San Alberto se encontraba en Francia traduciendo libros de ciencias naturales escritos por Aristóteles. Estos monjes buscaron entender más profundamente esta ciencia, sobre todo San Alberto, quien aparte de traducir realizó un gran número de anotaciones y correcciones a la obra de Aristóteles, estas observaciones estaban basadas en investigaciones realizadas por él. Destacó la importancia que le dio al método empírico o científico. Rescata la importancia de las matemáticas para entender la naturaleza, si bien es cierto que el papel de las matemáticas era secundario porque según él todo se debía a las leyes divinas. Estas investigaciones le hicieron a San Alberto ganarse muchos enemigos ya que muchas de sus investigaciones rayaban los límites de lo que la ciencia permitía. En el campo de la física estudió las leyes de la reflexión y la refracción sobre los que se basan los estudios ópticos. El movimiento de atracción de los cuerpos (gravedad) en ese momento se desconocía la existencia de esta fuerza pero el describía en sus estudios que había algún tipo de fuerza que hacía que los cuerpos se atrajeran. Se dio cuenta de que el arco iris se formaba cuando las gotas de sol atravesaban las gotas de lluvia. Estableció que las manchas de la luna no se debían a sombras sino a la orografía del terreno. La mayor parte de sus estudios los centró en la biología centrando sus estudios en el reino animal. Clasificó algunos tipos de plantas, descubrió que la savia de los árboles subía desde el suelo a las ramas. Descubrió la importancia de la luz para la fotosíntesis. Aceptó que las plantas podían evolucionar para adaptarse a distintas condiciones climáticas. Desechó la teoría de los seres y animales fantásticos de la edad media. Estudió la reproducción de las gallinas. También contribuyó en el campo de la medicina, odontología y anatomía. Destacan también sus estudios en el campo de la alquimia, de hecho muchos trabajos de alquimia llevan sus nombre.
Podría seguir enumerando muchas de sus contribuciones a la ciencia pero entonces este post sería casi interminable. Os animo a que busquéis vosotros información sobre los trabajos de este santo en el campo de la ciencia.
Por todo su trabajo el Papa Pio XI lo proclama Santo, además también lo nombrará uno de los treinta y cinco doctores de la iglesia. Y en 1941 Pio XII lo nombra patrón de los cultores de las ciencias naturales. Por ultimo me gustaría anotar una cita de Rousselot “Se asegura que Alberto Magno abandono la agitada labor obispal para poder dedicarse a la soledad de su laboratorio de alquimia”.



