Como ya he comentado en muchas ocasiones, en la década de los 60 la humanidad buscaba un material duradero, se ve que teníamos suficiente con los que tenemos. Y de esta forma llegaron los plásticos. Ahora nos hemos dado cuenta de que lo de usar y tirar no es una buena idea, ya que tenemos auténticas islas de plástico. Por lo que se ha puesto fin a los plásticos de un solo uso.
Fin a los plásticos de un solo uso
A partir de hoy, 3 de julio, “desaparecerán” los plásticos de un solo uso, y sí, lo entrecomillo, porque más tarde os comentaré el porqué. Esta medida busca reducir los plásticos de un solo uso y toda la contaminación que estos acarrean.
Esta nueva ley afectará a platos, cubiertos, pajitas para beber, bastoncillos de algodón y envases de polietileno para envolver alimentos. Esta nueva directiva ha sido promulgada por la Comisión Europea, con el objetivo de que se aplique de manera uniforme en toda Europa. Pese a ser una norma que se conocía su aplicación desde hace tiempo, ha muchos establecimientos los ha pillado de sorpresa.
A partir de hoy los fabricantes no podrán suministrar plásticos de un solo uso a restaurantes, supermercados, etc. Si tenéis un bar o un restaurante podréis continuar usando estos plásticos de un solo uso hasta que agotéis los que tengáis almacenados.
El que hizo la ley hizo la trampa
Respecto al entrecomillado de al principio del artículo “desaparecerán” los plásticos de un solo uso lo he entrecomillado porque el que hizo la ley, hizo la trampa. Y es que muchos supermercados continuarán vendiendo los mismos utensilios del mismo plástico, pero para salvaguardar la ley han cambiado el envoltorio de estos y han, puesto que se pueden reutilizar, cuando siguen estando hechos del mismo material plástico. Obviamente, ahí ya recae la responsabilidad sobre la persona que compra el volver a usar el utensilio de plástico y tirarlo.
Aparejos de pesca
Esta nueva ley, también afecta a los aparejos de pesca, ya que se busca reducir la basura marina. Hay zonas de los océanos que son auténticas islas de plásticos. Estos plásticos tardan decenas de años en degradarse. En muchas ocasiones nos puede parecer que se han degradado, pero en realidad es que su tamaño sí ha visto reducido, y debido a la fricción se han convertido en lo que se conoce como microplásticos. Tal es el problema, que muchos de estos microplásticos se han llegado a introducir en la cadena alimenticia.
Cápsulas de café
Otro objeto de nuestro día a día, bueno, que en los últimos años se ha convertido en un objeto cotidiano, y que se verá afectado por esta nueva directiva son las cápsulas de café desechables. Las cápsulas que insertamos en las máquinas de café modernas.
El reciclaje de estas es un auténtico problema, ya que no disponemos de medios para su correcto reciclaje. Debemos de verter estas al contenedor amarillo donde serán recicladas una parte de estas, pero no todas, ya que los mecanismos de separación no son del todo óptimos. En la actualidad muchas tiendas, que venden estas mismas cápsulas, son puntos de recogida de los residuos de las cápsulas, uno tienda de estas es las tiendas Nespresso. Incluso ellos han afirmado que no disponen de medios para su reciclado óptimo, solo se recicla el 10%, pese a ser el porcentaje de reciclado superior al del contenedor amarillo. Esta marca ha afirmado que se encuentra trabajando para que en los próximos años las cápsulas contengan un % de material reciclado.
Utensilios de más de un uso
A partir de ahora debemos utilizar utensilios biodegradables, de madera, de bambú, o de pasta de azúcar, pero debemos de gastar un especial cuidado con estos, ya que muchos de estos utensilios, sobre todo bandejas, recipientes, o bolsas vienen recubiertos con una película plástica que los hace no reciclables. Un ejemplo de estos son los tetra Brik, que en su interior encontramos una película plástica acompañada de aluminio. Se separa el cartón del resto de componentes, pero ninguno de los dos puede volver a utilizarse para la industria alimenticia. El cartón se emplea en la realización de embalajes, y la mezcla de aluminio y plástico va a un vertedero o es incinerado. En otra entrada de blog os hablaré de forma más extensa sobre los tetra Brik y los problemas que conllevan.
Sin embargo, las botellas de agua están realizadas con un material que es plástico PET autorizado por la Autoridad Europea de Seguridad alimentaria para volver a ser utilizado en alimentación. Para el año 2025, el 25 % de cada botella deberá estar compuesta de material procedente de otras botellas recicladas. En la actualidad, se recupera el 83 de las botellas PET (siempre que se viertan al contenedor amarillo). Un grave problema se plantea con el color de las botellas, las de color azul y rojo no se usan mucho y las pocas que se usan no se pueden reciclar bien porque luego no hay personas que compren este plástico.
Problema del plástico para el medioambiente
Por supuesto, los plásticos son un grave problema para el medioambiente, pero tampoco podemos dejar que nos vendan duros a pesetas. El tetra Brik no es que sea mejor opción que una botella de plásticos, pero tampoco malentender esta afirmación. El plástico ocasiona un grave problema de contaminación, pero si el tetra Brik continúa vendiéndose a este ritmo también será un problema.
En la actualidad la empresa Unilever está trabajando duro para que sus envases sean de plástico reciclado y en su interior no encontremos esta mezcla de plástico y aluminio. Estos nuevos envases estarán recubiertos con un compuesto que repelerán el agua y evitarán la filtración del líquido del anterior.