La borrasca Filomena ya ha dejado paso a una situación anticiclónica que ha propiciado un descenso de temperaturas. Durante estos días tenemos en la Península Ibérica temperaturas propias de lugares cercanos al polo norte. Esto se debe porque una masa de aire fría se ha descolgado de sus latitudes normales. No voy a entrar a explicar mucho el tema meteorológico porque no soy una experta en meteorología. En esta ocasión voy a tratar otro que si conozco más en profundidad y es el cambio climático.
Y es que hace unos días leí una publicación en redes sociales que me hizo mucha gracia. Se ve que esta persona es un negacionista del cambio climático, porque lo que publicó no tiene ni pies de cabeza. Pero estoy segurísima de que es un pensamiento que tienen muchas personas y por eso quiero desmentirlo.
Esta persona publicaba en sus redes sociales una tabla en la que aparecían las temperaturas máximas y mínimas que íbamos a tener durante esta semana. Temperaturas que obviamente son inferiores a lo normal en un clima mediterráneo. Esta persona acompañaba esta fotografía de la siguiente frase “¿Dónde están ahora los defensores del cambio climático? ¿Cómo pueden explicar que haga tanto frio? A esto yo podría contestar “Hola, aquí estoy”.
¿Sabéis qué es lo que me parece más grave de todo? Que esta persona es lo que se conoce como influencer, o como se dice en español es un influyente, ósea una persona que tiene influencia sobre otras debido al gran número de seguidores que tiene. Aunque más bien se le podría calificar como microinfluyente.
El caso de los microinfluyentes es muy paradójico, porque pese a tiene un número reducido de seguidores, estos le hacen digamos que mucho caso, porque lo siguen por su contenido y porque les gustan sus publicaciones. No lo siguen por el hecho de ser muy famoso, como ocurre con otros influyentes.
Estas temperaturas son reflejo del cambio climático. El cambio climático no nos trae solo temperaturas cálidas extremas, sino también temperaturas frías extremas como es este caso.
Cambio climático
El cambio climático está provocado porque a la atmósfera se emiten una serie de gases que incrementan las temperaturas. Estos gases se encuentran en la atmosfera de forma natural en una cantidad determinada X. Estos gases atmosféricos captan el calor irradiado por la tierra y lo devuelven hacia esta. Este efecto es conocido como efecto invernadero natural, que posibilita la vida en la Tierra, sino nuestro planeta estaría congelado y no se podría vivir en él.
Ahora si la cantidad de estos gases se incrementa, el calor que estos gases atmosféricos devuelven a la Tierra también aumenta. Provocando una serie de consecuencias negativas en la Tierra, como es el deshielo de los polos, aumento del nivel del mar, cambios en el albedo, cambios en la dinámica atmosférica, pérdida de biodiversidad, etc.
El cambio climático incrementa los fenómenos meteorológicos adversos. Afectando de forma diferente distintas partes de nuestro planeta. Por ejemplo, en algunos sitios hace más calor de lo normal, como es el Ártico. Estás temperaturas han desplazado el vórtice polar hacia el oeste de Europa. Este aumento de temperatura ha propiciado que este vórtice polar sea más ondulado. En esta situación hay más posibilidades de que una bolsa de aire frio se pueda descolgar de las latitudes polares.
¿Este descenso de temperatura ha provocado la nevada?
No, para que nieve se tienen que dar unas condiciones específicas, que de manera muy resumida podemos decir que es mucho frío y humedad. Durante estos días anteriores hemos tenido estas condiciones. La llegada de esta masa de aire frio polar se ha unido a la borrasca Filomena, que ha aportado la humedad. En la actualidad la borrasca ya se ha deshecho y ha abandonado la Península Ibérica, pero la masa de aire frio nos sigue afectando. Ahora muchos se harán otra pregunta.
¿Por qué hace menos frío cuando nieva?
Cuando nieva tenemos el cielo cubierto de nubes. Nubes que están compuestas de vapor de agua, uno de los gases causantes del efecto invernadero. El vapor de agua, de las nubes capta el calor que irradia la tierra y lo devuelve hacia esta, aumentando la temperatura de la Tierra. Cuando estas nubes se retiran, baja la temperatura por lo anteriormente comentado.
Este efecto no es algo que se haya descubierto recientemente gracias a avances científicos. Los antiguos observaban muy bien el medio que les rodeaba y eran capaces de “predecir” determinados fenómenos atmosféricos. Seguro que más de uno de vosotros habéis escuchado alguna vez “Hoy está el cielo despejado, verás la helada que va a caer”.
Y es que, al disminuir la temperatura en el exterior por no haber nubes, esto propicia que se llegue al punto de rocío, temperatura a la cual el vapor de aire se condensa en la llamada escarcha o rocío, que cubre coches, mobiliario urbano, vegetales, etc.
Como podéis ver el término cambio climático es más complicado de lo que muchas personas piensan y hay muchos fenómenos atmosféricos implicados. Por eso debéis escuchar a personas expertas, por eso es tan importante el papel de los divulgadores científicos. Personas dedicadas a difundir conocimientos científicos de forma adecuada.
