El Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía, celebrado cada 17 de junio, busca concienciar sobre la desertificación y la sequía, promoviendo acciones para combatir estos problemas. Proclamado por la ONU en 1994, este día destaca la necesidad de preservar tierras, garantizar la seguridad alimentaria y apoyar a las comunidades afectadas, fomentando la sostenibilidad y la resiliencia ante el cambio climático.
Día Mundial de lucha contra la desertificación y la sequía
Seguro que alguna vez has escuchado la expresión,
«En la prehistoria, una ardilla podía cruzar España saltando de árbol en árbol».
Desconocido
Esta expresión nos hace reflexionar sobre el terrible impacto que el ser humano está causando en la naturaleza. En las primeras épocas de la Tierra el ser humano necesitaba la madera para satisfacer sus necesidades primarias; por ejemplo: alimentación (usaban fuego para cocinar), calentarse o incluso defenderse. Con el tiempo la madera también se utilizaba para el transporte de mercancías y personas.
Los bosques son recursos no renovables
Por todo esto, los grandes bosques que cubrían la península han ido desapareciendo de manera irreversible, y es que hasta hace pocas décadas no hemos caído en la cuenta de que la madera es un bien material “no renovable”. Y es que durante muchos años el hombre ha talado los bosques sin replantar las especies arbóreas que iban talando.
Hace unos días leía un interesante artículo de “microsiervos” donde explicaba que para que un bosque recupere su estado esencial, hacen falta 65 años, y para que adquiera su verdadera identidad hacen falta 4000 años. Por eso ponía lo de que es un bien no renovable entre comillas. En medioambiente se habla de recursos renovables a aquellos que tienen una capacidad de autoregenerarse a escala humana, y como acabáis de leer, los bosques no tienen esa capacidad.
Diferencia entre desertificación, deforestación y desertización
Si a la actividad humana sumamos la capacidad destructiva del fuego, vemos que los bosques en la Península Ibérica y en todo el mundo están en una situación crítica. Toda esta serie de actividades que producen una degradación ecológica del suelo fértil se conoce como desertificación. Y es que la desforestación y la destrucción de cubierta vegetal por cualquiera de los motivos que antes he numerado producen una pérdida de suelo. Al no haber material vegetal que retenga el terreno se produce una erosión del terreno.
Según datos del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) el 35% del área de los continentes puede considerarse un área desértica en la actualidad y la tendencia es que este porcentaje siga aumentado. Este proceso de desertificación deriva en un proceso de sequía, ya que las raíces de las plantas tienen la capacidad de retener agua que a su vez acarrea problemas mayores como es la escasez de comida.
Por ello, a modo de conclusión podemos decir que:
- Desertización: es la pérdida de suelo productivo o el deterioro del mismo por causas naturales. Un ejemplo, podría ser el Desierto del Sahara.
- Desertificación: es la pérdida de suelo productivo o degradación del suelo por la actividad del ser humano.
- Deforestación: Es el fenómeno de la pérdida de superficie forestal, puede ser tanto por causa natural como por la acción del hombre. En este caso no implica una degradación del suelo en sí mismo, pero sí puede ser un paso previo a los fenómenos anteriores.
Lucha contra la desertificación y la sequía
Cada 17 de junio se celebra el “Día Mundial de la lucha contra la desertificación y la Sequía” para intentar concienciar a la población mundial de la importancia de combatir contra este fenómeno. Además, debido a la cercanía del verano y los terribles incendios que se producen en estas fechas, resulta más importante la concienciación de la sociedad.
- El lema del año 2020 fue “”Suelo sano=gente sana»».
- En el año 2021, el lema fue: «Restauración. Tierras. Recuperación».
- Debido a la disminución de lluvias, el lema en el año 2022 fue: «Superando juntos las sequías».
- En el año 2023, se puso el foco en las mujeres y en las niñas, siendo el lema «Mujeres sus tierras».
- Este año 2024, el lema es: «Unidos por la tierra: Nuestro legado. Nuestro Futuro».
Día Mundial de la lucha contra la desertificación y la sequía 2024
Este 2024 se cumple el 30 aniversario de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (CNULD), con sede en Bonn. La CNLUD es el único tratado internacional jurídicamente vinculante sobre la gestión de tierras y una de las tres Convenciones de Río junto con las de cambio climático y biodiversidad.
Ibrahim Thiaw, Secretario Ejecutivo de la CNULD, ha destacado que hasta el 40% de las tierras del mundo están degradadas, afectando a más de la mitad de la humanidad. Señala que recuperar tierras puede sacar a las personas de la pobreza y aumentar su resiliencia al cambio climático. El acto mundial de conmemoración, organizado por el Gobierno de Alemania, se celebrará el 17 de junio de 2024 en el Bundeskunsthalle de Bonn. Jochen Flasbarth, Secretario de Estado del Ministerio Federal de Cooperación Económica y Desarrollo, subraya que una cuarta parte de la población mundial está afectada por la sequía y que es crucial proteger los suelos para enfrentar la crisis climática y de biodiversidad. El evento reunirá a líderes mundiales y diversas personalidades para destacar la importancia de la unidad en la protección de las tierras, en preparación para la COP16 de la CNULD en Riad, en diciembre de 2024.
El poder transformador de las mujeres: el Plan de Acción sobre Género
La Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación ha creado recientemente un nuevo plan para apoyar y promover las políticas sensibles a las cuestiones de género. El Plan de acción de género aumentará y fortalecerá la participación y el liderazgo de las mujeres en todos los niveles de toma de decisiones y la aplicación local de la Convención, como en la gestión de la sequía y las tormentas de arena y polvo, y en los trabajos para neutralizar la degradación de la tierra. El objetivo es alcanzar la paridad de género en estas cuestiones para 2030.
Las mujeres son agentes activos del cambio. Así se ha demostrado cuando se les ha dado las mismas oportunidades y el mismo acceso a los recursos y se les ha permitido participar en la toma de decisiones; los resultados son palpables, sus comunidades son más prósperas y más pacíficas. Las partes de la Convención se han comprometido a mejorar la calidad de vida para las mujeres del mundo. Este plan supone una oportunidad histórica para llevar a la práctica real la igualdad de género y los derechos humanos.
La desertificación y los Objetivos de Desarrollo Sostenible
La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible afirma que «estamos decididos a proteger el planeta contra la degradación, incluso mediante el consumo y la producción sostenibles, la gestión sostenible de sus recursos naturales y medidas urgentes para hacer frente al cambio climático, de manera que pueda satisfacer las necesidades de las generaciones presentes y futuras». Específicamente, el Objetivo 15 recoge nuestra determinación a detener y revertir la degradación de la tierra.
